Primer punto

Fichas de una clase determinada podrían representar la realidad de aquella época, por ejemplo, cada uno de los animales de los rebaños del palacio se representaba cómo una pieza de arcilla. Se movían las fichas de un estante a otro, probablemente, cuando los animales se “movian” de un lugar a otro.

Los tokens eran guardados en envolturas de arcilla
a los que se les introducía o se les sacaban las piezas de arcilla, dependiendo del tipo de transacción que el usuario necesitaba registrar

El surgimiento de las ciudades aumentó el intercambio o trueque. El uso de la moneda promovió llevar un registro de dicha información.

El paso del tiempo llegó con la necesidad de inspeccionar y registrar diversas clases de datos, desde ganado, territorios y plantaciones, hasta trabajadores, censos, impuestos, etc.

En el actual Pakistan se encontraron sellos fechado, los cuales probablemente corresponden a las primeras monedas.

Desde que comenzó el comercio de bienes, se buscó la manera de conservar el registro de las transacciones y de los resultados obtenidos en la actividad comercial, esto se logró con el surgimiento de la moneda y la Contabilidad.

Se considera un aumento en el comercio con una gran necesidad de llevar un registro del mismo.

Fray Luca Bartolomeo Pacioli da el inicio de la literatura contable con su obra, titulada: " La Summa de Aritmética, Geometría Proportioni et Proportionalitá" en donde el monje veneciano considera el concepto de la partida doble por primera vez.

La necesidad del hombre de procesar automáticamente los diferentes datos lleva a Blaise Pascal (1623-1662) a realizar la primera máquina sumadora. Este aparato estaba formado por ruedas, cada una de ellas marcaba en su borde cifras del 1 al 10.

El trabajo de Joseph Marie Jacquard con un telar programable y tarjetas perforadas fue el soporte para futuros dispositivos de almacenamiento de datos.